Dos millones de personas que no encuentran solución que agilice las largas listas de espera.
A partir de los datos oficiales de la DGT, se ha realizado un análisis, en el que se ha esclarecido que en España hay más de dos millones de personas a la espera de examinarse para obtener el permiso de conducir.
Actualmente, la plantilla de examinadores en toda España, es de 704 examinadores, y cada examinador puede realizar hasta 12 exámenes al día. Lo que según este análisis serían necesarios 33 meses para examinar a todos estos alumnos pendientes de examen.
La Dirección General de Tráfico (DGT) obtiene sus ingresos a partir de las tasas que percibe de los usuarios que aspiran a los permisos de conducir y de las multas que obtiene a partir de su función recaudatoria.
En 2019, la DGT transfirió 622,3 millones de euros al Estado procedentes de tasas y multas, lo que lejos de dedicar parte de ese presupuesto a aumentar la plantilla de examinadores, esta se ha visto incluso disminuida.
De 791 examinadores que había en 2020, 70 de ellos realizan labores de Coordinación y 17 forman parte de la Subdirección General de Formación y Educación Vial, lo que reduce la cifra a 704 examinadores activos para realizar exámenes de conducción.
La solución aportada por la DGT para suplir el escaso número de examinadores, ha sido imponer el sistema CAPA.
Este sistema, en lugar de incrementar el número de exámenes, lo que hace, según la Subdirectora de Formación de la DGT, María José Aparicio, es “ajustar y repartir la capacidad de examen de cada Jefatura Provincial de Tráfico”.
De este modo, a cada autoescuela se le otorga un cupo de alumnos que puede presentar a examen, lo que no ayuda a acortar las largas listas de espera.
El cálculo de la capacidad de cada Jefatura Provincial se realiza en función del número total de alumnos pendientes de examen de circulación para la obtención del permiso de conducir de la categoría B que hayan superado el examen teórico, y de la tasa de éxito de la autoescuela en relación con la media total.
No es el sistema CAPA la solución a los retrasos en los exámenes prácticos, pues este sistema no incrementa el número de exámenes, lo que hace que siga siendo insuficiente el número de exámenes disponibles para los usuarios ante un constante incremento de demanda de permisos por parte de los ciudadanos.
La inactividad por parte de la DGT está provocando que las autoescuelas se manifiesten, ya que son los que reciben las constantes quejas por parte de los alumnos, sin que ellas sean las causantes de estos retrasos.
Puedes encontrar más información sobre esta noticia aquí.